La riqueza en el léxico es siempre de agradecer, excepto cuando tienes que aprendértela. Por ejemplo, y en nuestro afán simplificador, a la hora de vestirnos y equiparnos podemos usar simplemente el verbo
poner y luego el aditamento en cuestión, verbi gratia, nos ponemos camisas, pantalones, guantes, gorras, gafas, relojes... aunque en ocasiones existen verbos específicos, ya que los zapatos se calzan (y los guantes, curiosamente, también), las ropas se visten o un sombrero se encasqueta. Sin embargo, podemos optar por el verbo específico o el socorrido
ponerse el/la, cosa que no es posible en japonés, donde deben emplearse únicamente los específicos, de los que he hecho un pequeño resumen:
- Kimasu: camisa, chaqueta
- Hakimasu: pantalones, falda, calcetines, zapatos
- Tsukemasu: perfume
- Kaburimasu: sombrero, gorra
- Kakemasu: gafas
- Shimasu: guantes, pendientes, reloj, maquillaje
Así que si uno quiere salir por ahí de punta en blanco, el proceso lleva seis verbos distintos.