Desde mi llegada a estas tierras he intentado aprender el idioma, teniendo eso como una de mis prioridades. Sin embargo debo admitir que, simplemente, no soy bueno con los idiomas. Tengo 6 clases por semana, de lunes a viernes (los martes, ración doble). Hasta hace poco tenía otra más los sábados, y no es que me haya retirado, sino que el profesor, un voluntario, se ha ido a España a hacer el camino de Santiago por cuarta vez, si no me equivoco, y no vuelve hasta agosto.
Por orden cronológico-semanal, mi primera clase la tengo en YOKE. Al día siguiente tengo por la mañana en la Casa de España y por la tarde en Kumon. El miércoles nuevamente YOKE. Jueves Casa de España, y finalmente, el viernes, otra vez Kumon.
YOKE es un acrónimo de
Yokohama Association for International Communications and Exchanges, o Asociación de Yokohama para el Intercambio y Comunicaciones Internacionales. Entre otras muchas cosas ofrecen cursos de japonés de 20 lecciones, que duran aproximadamente tres meses. Según tu nivel, te colocan en grupos más o menos avanzados. La ventaja es que es muy barato, 10.000 yenes, y el problema es que sólo puedes tomar las clases un máximo de tres veces.
Casa de España es una creación de la Sociedad Hispánica del Japón. Entre otras actividades, como cursos de español para japoneses, conferencias o exposiciones, incluyen las clases de japonés. El precio triplica al de YOKE, pues son 30.000 yenes por 20 clases, pero sigue siendo barato comparado con otras academias. Lo malo es que me pilla bastante lejos y me cuesta bastante, en tiempo y dinero, asistir.
Por último,
Kumon. Emplean un sistema progresivo que se adapta muy bien a mi modo de aprendizaje. Dividido en niveles, cada uno de ellos se divide en 10 unidades, constando cada una de un cuaderno de ejercicios. El proceso normal es hacer uno o más en casa cada día, y llevarlos a la academia, donde son corregidos mientras hacemos otro cuaderno más
in situ. Tras una práctica de lectura, hemos de corregir los errores detectados y hacer una nueva prueba de lectura, tras lo que se nos entregan los cuadernos que debemos realizar en los próximos dias. El material complementario es una libreta con textos y ejercicios para practicar. Se acompaña de un CD con los textos grabados. La ventaja es que tú marcas tu ritmo, y no se basan en repetir frases como un loro, sin saber siquiera cómo escribirlas. El precio son 8.400 yenes mensuales, y cada vez que pasas el nivel has de comprar la libreta y CD del siguiente nivel, por 1.050 yenes.